Nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS cumple diez años impulsando el comercio en monedas locales
La institución busca afianzarse como una plataforma para el Sur Global que promueve la autonomía financiera y el desarrollo sostenible.

La Presidenta del Nuevo Banco de Desarrollo reafirmó que los países BRICS y el Sur Global tienen el «derecho y la capacidad de trazar sus propios caminos de desarrollo». Foto: Brasil de Fato.
5 de julio de 2025 Hora: 15:14
Bajo el liderazgo de su presidenta Dilma Rousseff, el Nuevo Banco de Desarrollo (NDB) celebra este mes su décimo aniversario, consolidándose como una alternativa concreta al orden financiero mundial y desafiando la hegemonía del dólar.
LEA TAMBIÉN:
Lula pide a empresarios de los BRICS defender el multilateralismo y liderar un desarrollo sostenible
La creación del NDB, aprobada en la cumbre de Fortaleza en 2014, fue un marco en la actuación conjunta de los países emergentes.
Esta institución surgió de la insatisfacción histórica de los países periféricos con la gobernanza de instituciones de Bretton Woods, como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial, y la falta de reformas efectivas en ellas.
A diferencia de los bancos tradicionales, el NDB fue concebido con cuotas iguales entre sus miembros fundadores y una estructura más horizontal, buscando financiar el desarrollo de una manera más justa.
Al respecto, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, enfatizó que el NDB es la prueba de que «una arquitectura financiera reformada y un nuevo modelo de desarrollo más justo es posible».
Una de las prioridades centrales del NDB y del bloque BRICS+ es la facilitación del comercio y las inversiones mediante el desarrollo de medios de pago en monedas locales; que actúa como una alternativa ante las restricciones impuestas por países como Estados Unidos y la Unión Europea, así como los aranceles elevados que han hecho inviable el comercio en algunos casos.
En este sentido, la secretaria de Asuntos Internacionales del Ministerio de Hacienda de Brasil, Tatiana Rosito, explica que un objetivo del BRICS es ampliar el uso de monedas locales para reducir costos y beneficiar a importadores y exportadores.
Los países emergentes ya cuentan con acuerdos para el uso de sus propias monedas en el comercio y buscan ampliar esta posibilidad a todos los miembros.
Así, por ejemplo, China ya realiza el 95 por ejemplo de su comercio con Rusia en yuanes y tiene acuerdos para negociar en monedas locales con Brasil, India, Sudáfrica, Indonesia, Arabia Saudita, Egipto y Etiopía.
También el primer ministro malasio, Anwar Ibrahim, también citó los esfuerzos regionales entre Malasia, Indonesia, Tailandia y China para comerciar en monedas locales como un ejemplo de cambio viable.
Además, Rusia e Irán conectaron sus sistemas de pago, MIR y Shetab, para facilitar las transacciones transfronterizas y el comercio en sus monedas locales.
Dilma Rousseff destacó que el 24 por ciento de las operaciones del NDB ya se realizan en monedas nacionales, con casi un tercio de la financiación del banco (31 por ciento) proveniente de estas divisas.
Bajo la gestión de la exmandataria brasileña, cuyo mandato fue extendido por cinco años más, el NDB ganó una «nueva dimensión geopolítica e internacional».
La presidenta reafirmó que los países BRICS y el Sur Global tienen el «derecho y la capacidad de trazar sus propios caminos de desarrollo», e ha instó al NDB a consolidar su papel de liderazgo para un «desarrollo equitativo, sostenible y autónomo en un mundo multipolar».
Autor: teleSUR - cns - JDO
Fuente: TV BRICS – Brasil de Fato